TRILOGÍA DE LA REFORMA UNIVERSITARIA 2 - Significado de la Gesta a 100 años de la Reforma
SIGNIFICADO DE LA GESTA
A 100 AÑOS DE LA
REFORMA
Por
Eduardo Dalmasso *
El desarrollo de un estado
democrático avanzado, se encuentra en íntima relación con la vigencia de
centros educativos de excelencia. Es
decir, si no contamos con Universidades de excelencia, tampoco la conducción
política del Estado estará a la altura, que la complejidad de la sociedad
exige.
Sólo de las Universidades de
excelencia surgen o deberán surgir: las elites sociales, técnicas y políticas
que sirven de guía en los diferentes derroteros de la vida en sociedad. El
hecho de señalar tres aspectos y no uno, no es casual. Si lo técnico científico
no se nutre de la cultura apropiada para contribuir al crecimiento cualitativo
del pueblo, estaríamos desarrollando aquello que Deodoro Roca denominaba con
suma crudeza “la servidumbre de la inteligencia”.
La Gesta Reformista, no fue
solamente un grito de rebeldía ante un orden dogmático, cerrado al avance de la
ciencia y al ámbito de la clase social conservadora. La Gesta Reformista
sostuvo una mirada diferente del mundo. Una mirada que recuperaba el
inconmensurable valor de la ciencia, el rol de la Universidad en la vida democrática
de los pueblos, la comprensión de lo académico como fuente de curiosidad y
aprendizaje permanente y a un rol diferente y menos adocenado de los
responsables de la enseñanza. Este movimiento de jóvenes reformistas, puso por
delante la necesidad de recrear otras condiciones espirituales y culturales.
Condiciones que se contrapusieran al desastre europeo, que había sido revelado
con la pérdida de millones de vidas en la gran guerra.
¿Si eran idealistas?
Si, eran idealistas. Querían cambiar
el orden impuesto de las cosas. Buscaban propiciar una Argentina inserta en la
identidad latinoamericana, y no en la dependencia servil del decadente orden
europeo o estadounidense. Con estos
últimos, confrontaban la visión espiritual, no sin dejar de admirar su enorme
desarrollo material.
Anti dogmáticos por excelencia, los
reformistas leían y dialogaban con diversos exponentes. Con Palacios, el primer
Diputado socialista de América, con filósofos de la talla de Ortega y Gasset y
Alejandro Korn, con escritores críticos como José Ingenieros, Saúl Taborda y
Manuel Ugarte; con Ricardo Rojas y el libertario Leopoldo Lugones. También,
resulta insoslayable el acercamiento y conocimiento que tenían del Ariel,
escrito por José Enrique Rodó, que movilizó a diversos sectores de la
intelectualidad latinoamericana. En este texto, se representaba un alegato
contra el pensamiento positivista y la extrema dependencia hacia el modelo
europeo como instancia superior a imitar.
Significado de la Gesta
Pocos estudiantes tienen plena
conciencia del significado de la Gesta Reformista; no tan sólo en lo que
respecta a la vida universitaria, sino también en aquello que atañe al progreso
intelectual, político y social de la República.
Los protagonistas de la Gesta
Reformista, desmentían la mítica edad de oro de la Argentina de principios de
siglo. No ignoraban el hecho de que el país recién comenzaba a superar modelos
de gobierno modernizantes, pero ilegítimos en su constitución. Tampoco desconocían
que el desarrollo material alcanzado, estaba atravesado por serias
contradicciones sociales y económicas. Por este reconocimiento, los jóvenes de
la reforma, denunciaban los modelos clientelares que caracterizaban la vida
cívica y el poco afecto hacia la meritocracia como base de la construcción
política y social. Para ellos, era imperante que la Universidad se convirtiese
en un faro que irradiara excelencia y valores, que permitieran la superación de
las fracturas de las que adolecía la Argentina. Por cierto, todos ellos
detestaban la mediocridad y sostenían que la libertad de los hombres, es el
atributo fundamental para alterar la realidad.
La realidad actual de nuestro país,
detenta un cuadro social y político que merece la atención de nuestros estudiantes
y profesores. Pocos nos atrevemos a decir que hemos vivido una guerra civil
encubierta con graves consecuencias para el progreso, la equidad social y la
vida cívica. Los agudos conflictos de larga data, han estallado en distintas
circunstancias, con resultados negativos de marginalidad social, falta de
crecimiento sostenido y emergente distribución regresiva del ingreso.
Es verdad, que tenemos istmos de
modernidad: en artes, tecnología y ciencia, pero son sólo eso, istmos. No pesan
en el cuadro global, ni alteran la grave decadencia del sistema educativo.
El rol de la Universidad Nacional de
Córdoba
Nuestra cuatro veces centenaria
Universidad, tiene una incidencia insoslayable en la vida social, política,
tecnológica y científica; no sólo en Córdoba, sino en todo el país. Entendemos
que no por esto, le cabe a ella otorgar una solución al cuadro de la Argentina,
pero sí le ocupa no abstraerse de esta realidad. Esto implica una profunda
reflexión sobre el rol de la Universidad y su incidencia en la reproducción de
los valores vigentes y sus consecuentes daños. El principio de esta reflexión,
podría enarbolarse en uno de los pilares del pensamiento reformista: la
representación política abierta y participativa como llave para evitar que el
sistema conservador se perpetuara, en cualquiera de sus formas.
Alejandro
Korn, al asumir como primer Decano de filosofía reformista en la UBA, se
dirigió a los estudiantes con este concepto: "Estudiantes, ahora que son
parte de la conducción del sistema universitario y no meros invitados, tienen
la tremenda responsabilidad de hacer honor a su calidad de miembros activos. No
es la cuota de poder el tema, es lo que hagáis por ser excepcionales y
contribuir al engrandecimiento de la institución". Éste es el sentido de
la conquista y no otro.
A 100 años de la Gesta Reformista
que sacudió a los estudiantes de América, y que hoy es referencia en los
estudios y declaraciones de la UNESCO, su conmemoración es una invitación a
movilizar la inteligencia y la voluntad de cambio, para contribuir a una sociedad progresista,
abierta a la ciencia y al cambio social.
*Doctor en
Ciencia Política. Profesor de Posgrado en Liderazgo y Estrategia.
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