DISCIPLINA Y LIBERTAD

 DISCIPLINA Y LIBERTAD

24 de Enero de 2022

Por Eduardo Dalmasso*

Nada, sólo que estoy pensando que "la autodisciplina es la madre de nuestra libertad".  ¿Por qué? Porque la disciplina nos permite desenvolver los secretos de nuestra creatividad y, lo que es fundamental, expandir el tiempo que disponemos para gozar las posibilidades que estarán siempre a nuestra disposición, si es que logramos desarrollar la actitud de goce ante la vida.

La disciplina emerge cuando encontramos nuestro camino, lo que significa que hay que buscarlo sin desmayo.  Esto no es otra cosa que perseverar en reconocerse en sentimientos, formas de pensar, fortalezas y debilidades; en ese recorrido uno está buscando la dicha del vivir bien. Vivir bien, no es otra cosa que amar el hecho de estar vivo, ser agradecido y darse cuenta que cuando despegamos nuestras propias alas, esto nos pone en otra dimensión.

Entonces, en ese punto la disciplina no es disciplina, es la alegría del fluir conociendo los distintos estados de naturaleza y aceptándolos sin dudas, porque hemos acrecido en fortaleza y vamos trazando una senda de lo propio y siempre único. En suma, es la disposición de la energía necesaria para autorrealizarnos.

La libertad emerge como puerta de conexión con los otros y con el universo. Uno siente que la vida tiene sentido y que se expanden todas las fronteras, aunque uno no se mueva de un punto fijo. De paso: ¡Disfrutar viene de frutos, que se disponen!

- Texto recuperado de una publicación propia de 2018 -

*Dr. En Ciencia Política (CEA-UNC). Editor del Blog: Miradas Políticas y otros enfoques.